lunes, 16 de abril de 2012

Tres años en Twitter

Trabajaba en una imprenta y mi amiga Mariana me preguntó si tenía Facebook… “¿Qué es eso?” le pregunté. Con paciencia me explicó y me creó una cuenta. Me pareció interesante desde el principio. Me reencontré con amistades que tenía años que no veía. Hicimos reencuentros, los documentamos y los compartimos con los miembros del grupo que vivían fuera. Comencé a utilizar las “notas” del Facebook para escribir opiniones, poemas y todas esas cosas que antes anotaba en papelitos, pero que nadie leía. Después usaba los “nicks” como estatus. Los cambiaba varias veces al día, según lo que pasaba en política, alguna frase o algún pensamiento que quería compartir. Me encantaba Facebook. No tengo problema en decirlo. Invertía buena parte de mi tiempo actualizando, pero me desesperaba un poco el que no fuera tan “en vivo”.

Un día —6 de abril de 2009, para ser exactos—ya trabajando en Producto, terminada la hora del almuerzo y en ese tiempo de sobremesa que siempre he disfrutado tanto en los sitios donde he trabajado, mi amigo Alcides León (@aleon1969) se sentó en mi computadora y me enseñó el Twitter. Me animó y ayudó a abrir la cuenta y le dije —literalmente— “esto es un fastidio, Alcides. Tener eso solo para poner frasecitas y cosas que haces me parece un fastidio”. Alcides me vio con cierta cara de condescendencia que aprendí a reconocer y que era de yo-sé-algo-que-tú-no-sabes y me dijo “Todavía no lo sabes, pero créeme que tú eres una usuaria Twitter”. Él había creado un monstruo y tampoco lo sabía.

Pasó un tiempo la cuenta Twitter sin que yo le consiguiera utilidad —sí, eso nos pasa a todos, lo sé— y solo la utilizaba para leer noticias, ver el tráfico y otras cosas “funcionales”. Confieso que en alguna oportunidad llegué a pensar que Alcides me consideraba idiota, porque al decirme que era “usuaria Twitter” y yo el único uso que le conseguía a Twitter era leer noticias, pues, no era difícil sacar la cuenta.

Hasta que llegó “la revelación”… Para mayor disfrute y diversión de Alcides, el golpe llegó en su presencia, es más, de nuevo, gracias a él. Habíamos asistido a La Primera Cumbre del Futuro, organizada por Evenpro en la Quinta Esmeralda. Aunque nos pareció que más que de “el futuro” era de “el pasado”, porque los dos Chris echaban los cuentos de cómo se habían vuelto millonarios y exitosos, la charla resultó ser bien interesante. En un momento Chris Sacca aseguró que Twitter “sería el próximo Google” y yo casi que solté la carcajada, pero el tema es que, Alcides, excelente periodista y además del área tecnológica, se encontraba enfrascado escribiendo por su Blackberry, cosa que además de extraño, me pareció de muy mala educación. Me percaté además de que todos los periodista del área tenían la misma actitud. Ante mi inquietud, Alcides se limitó a decirme “después te explico”.

La explicación llegó al día siguiente, frente a la compu y de la mano de un “entra en Twitter”. Bajo el hashtag —palabra que descubrí ese día— #CumbreDelFuturoCcs se encontraban agrupados todos los comentarios de Alcides y de otros periodistas que habían asistido al evento. Era como volver a estar en la cumbre de nuevo. En ese momento entendí lo que era Twitter y entendí además lo que quiso decir Sacca cuando habló de que sería el nuevo Google.

A partir de allí, comencé a interactuar y no solo a leer. Tímidamente al principio. Comencé a seguir personas que me recomendaron seguir y a su vez a aquellas personas con los que éstos interactuaban. Memorable, por ejemplo, cuando comencé a seguir a @nuneznoda que se dedicó a poner historias y estadísticas relacionadas con el sexo. Memorable también cuando en agosto de 2009, Venezuela hizo su primera protesta virtual a través del HT #FreeMediaVe —lamentablemente nos acostumbramos a protestar de esta manera y abandonamos las calles, pero esa es harina de otro costal. Y por supuesto, impelable aquel 18 de septiembre cuando gracias a @capibar y @nuneznoda en Venezuela todos botamos la cédula llenando los Timelines de recuerdos bajo el HT de #caelacedula.

Mucha agua ha corrido bajo el puente o mejor dicho, muchos tweets han rodado por los TL desde aquel entonces. Hoy, 3 años después de aquel “tú eres una usuaria Twitter” puedo decir tranquilamente que sí, lo soy. Además y aunque suene pedante, creo que soy parte de esa “segunda vieja escuela” —segunda, porque mucho antes nos antecedió la escuela de @curiosa @modulor @huguito y afines— que logró “entender” el Twitter y lo pongo entre comillas, porque es difícil entender algo que en realidad no tiene forma, ni reglas, ni método. Tratar de entender Twitter es lo mismo que tratar de entender la naturaleza humana, porque de eso se trata. Leo a veces a gente —por Twitter, twitteando, sí— decir que los que twittean no tienen vida o que han vuelto del Twitter su vida. No puedo evitar reirme. Es la gente que no logra entender, que Twitter no sustituye la vida de nadie, simplemente se hace parte de la que ya tienes.

Mi balance, 3 años después es positivo. He conocido gente excelente que ha pasado de ser un avatar y 140 caracteres, a ser amigos, compañeros de trabajo, confidentes y en muchos casos incondicionales. He experimentado afectos muy distintos a los que había tenido en mi vida y no digo mejores o peores, sino distintos. He sentido la solidaridad de muchos en momentos en que la he necesitado. He reído con gente del otro extremo del país y he aprendido el significado de palabras que se utilizan en otro lado del mundo. Ha sido mucho lo que he aprendido en 3 años, gracias a los pedacitos de sí que cada quien expresa en 140 caracteres.

Mi mundo se ha hecho más grande y no porque antes fuese pequeño, sino porque ahora tengo la opción de llegar a personas a las que de otra manera nunca hubiese llegado, de conocer gente que de otra forma nunca hubiese conocido.

Así que hoy, 3 años después, puedo decir, no que soy una “usuaria Twitter”, sino simplemente “Soy Twittera”.

1 comentario:

  1. No se por qué pero Google me trajo aquí de nuevo, buscando otra cosa que no viene al caso. Leer esto de nuevo me produce la misma sensación tibia de haber estado allí antes. :)
    Te añado que cuando dice eso de "entender el twitter" cuando fui a entrevistar a @Dom, en ese mismo evento un año más tarde, y le solté un despreocupado y altisonante "ahora que Twitter se ha convertido en un medio de comunicación más..." el me interrumpió y me dijo, "Nostoros mismos no sabemos que es Twitter, aún ahora" algo que creo le pone más sabor a tu historia...

    Chapeu! para mi querida @tutudominguez

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